Falsa o doble moral

Esa falsa moral, esa en la que lo importante, no es qué ocurran las cosas sino que se sepan , es la que sé va imponiendo, lenta y viscosamente, para desgracia de la transparencia y la verdad.

Da igual como pasen las cosas, la verdad es relativa , lo importante es evitar que se sepa, que se publiqué en el periódico, que lo conozca todo el mundo, que se cuente en el trabajo o en la peluquería . Para algunos esa doble moral no es aceptable de ninguna de las maneras, para otros es la única manera de sobrevivir a su propia mezquindad.

Hay que mantener siempre las tesis oficiales , no moverse del pensamiento único, unos diseñan la idea otros la ejecutan , la hacen correr y el silencio cómplice ayuda a consolidarlas.

Recuerda mucho esa imagen franquista de aquellos, que bien peinados con ese bigote finito que les adornaba el labio superior, acompañados de sus señoras y sus hijos iban a misa todos los domingos, y se compungian , rezaban , pedían perdón y cogían crédito (a base de limosnas a la iglesia) para seguir jodiendo la semana siguiente. A los ojos de todo el mundo eran personajes temidos y "respetados" por la comunidad, enfundados en sus trajes grises y corbatas negras, hacían todo lo contrario de lo que predicaban , pero exigiendo a los demas el estricto cumplimiento de las reglas que ellos mismos imponían.

Afortunadamente en el siglo XXI es difícil amordazar o mantener una mentira y esperar el silencio individual y colectivo cuando las cosas no salen como uno pensaba .Creerse ilustrado en exceso, buena persona, generoso, referente colectivo de virtudes y maneras , es un autoengaño que solo conduce a profundas decepciones individules y colectivas.

La sociedad se siente engañada, manipulada, e instrumentalizada en favor de unos interés particulares revestidos de globalidad. Solo esperar que el tiempo ponga a cada uno en su sitio o plantar cara al engaño y la mentira.