En Ibiza la proximidad de las elecciones, ha hecho, que los partidos se vuelvan locos, donde no había candidatos, aparecen tres. Y donde lo había, sea éste un candidato condicionado "pero poco" y amenace con no serlo.
En el PP que ya huelen la victoria le salen novios al puesto de Presidente del Consell hasta tres y en el PSOE que ya huelen a derrota el candidato que hay nombrado y renombrado, amenaza con dejar de serlo con la misma solidez y credibilidad con que Fajarnés predicaba que no iba a ser el candidato al Consell, porque estaba encantado de estar en Madrid y que no le apetecía volver a la política local. Es evidente que ostentar la vara de mando de Vila te infunde no sabemos que halo o sesgo cognitivo que te inocula no sabemos que bicho que nunca más dices una verdad aunque te torturen.
Ahora todos ha repetir lo mismo, gane quien gane lo apoyaré, el partido es el mismo por lo tanto da igual quien gane. Porque somos una gran familia y nos llevamos bien a diario nos abrazamos y cada cuatro años nos acuchillamos por la espalda, pero también por la cara. Yo soy mas ibicenco que tú y aunque llevo cuatro años mirando la luna, si no me das el 15 ¡no voy! ¡ale!.
¡Déu meu quin nivell! estamos apañados, entre unos y otros. Que huérfano se siente el ciudadano a la hora de encontrar una opción que ilusione con las ideas, por sus propuestas y que este alejadas de los mismos personajes desde hace mas de 20 años que la mayoría ya lo han dado todo, si alguna vez tuvieron algo que dar.
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